I
Tu corazón cerrado
me recuerda a una noche
callada...
donde la nada
irrumpe,
donde la oscuridad me llama.
Y, sin embargo,
a ti vuelvo,
mil veces más...
como la que sólo
quiere ver
tu sombra,
antes que tu ausencia.
Pero invocaré
al viento
para conmemorar
esta inquietud
que asfixia a esta pobre flor,
que ahora yace en paz.
©Charlotte Bennet