El dolor más profundo se debilita cuando aprendemos a respirar entre ruinas...
1
He aprendido a ser,
siendo lo que soy:
una brisa
frente a la tempestad,
una voz
frente al silencio.
Mas ya no
quiero implorar
como quien ruega agua.
No quiero morir,
ni resucitar de tu mano,
ni esperar que dibujes soles rojos
en una tarde destronada.
No quiero
latir
entre tus esquelas,
sino ser esa orquídea blanca
que respira
entre la ruina y la helada.
© CHARLOTTE BENNET
No hay comentarios:
Publicar un comentario