
Tal vez el aire no palpite
y solo derrame sobre mí
su frío aliento
similar al de aquellas
flores aisladas
por un sol enredado,
que anuncia flaquezas
en virtud de quien espera
que anochezca
para que los muertos
despierten de la inconsciencia,
y puedan ver
cómo lo soñado no prospera,
cómo la hierba se transforma
en pétalos sedientos de palabras…
que no emergen
sino que se convierten
en nevada para el alma delirada…
© Propiedad Intelectual. Charlotte Bennet.
© Propiedad Intelectual. Charlotte Bennet.