
Comparece ante mí, la muerte…
tan mundana, y liviana,
ansiosa por segar mi aliento
roto por el frágil recuerdo
de tu hermosa sombra
amortajada entre linos blancos...
mientras la pena ruge, y el dolor,
juega a rebanar mi costado.
Llora el silencio sobre mi pecho calado.
Llora la madrugada sobre mis manos
desgarradas.
Lloro yo, tu ausencia anhelada...
...tu voz arrebatada, y sepultada
bajo la tierra escarbada,
que abriga tu fría calavera.
Más tu alma; noble, y delicada…
permanecerá, siempre, aferrada
al murmullo del viento,
que evoca tu nombre,
y que escucho entre horas destempladas…
© Propiedad Intelectual. Charlotte Bennet.
© Propiedad Intelectual. Charlotte Bennet.